Se una mezcla de vinos tintos que están en botas de 500 litros de madera hace más de 10 años.
Tiene unos aromas que recuerdan claramente un vino rancio, pero al ponerlo en la boca entramos dentro de las garnachas dulces,
con un contenido de azúcares de 290gr/litro que el fan mucho goloso y untuoso al más puro estilo de los Ximenez del sur.